Nicolás Polanía, el Delegado para Procedimientos de Insolvencia de la Superintendencia de Sociedades, les dio 48 horas a un grupo de liquidadores de la Superintendencia de Economía Solidaria para que consignen en una cuenta especial lo dineros que se deben destinar a pagar las deudas de varias cooperativas en liquidación, vinculadas al llamado caso Estraval.
El funcionario advierte que, desde junio pasado, se les pidió a los liquidadores embargar algunos bienes y poner a disposición de la Supersociedades los recursos respectivos. Pero, a la fecha, nadie ha cumplido la instrucción. Por eso, so pena de denunciarlos, Polanía les dio un ultimátum que se cumple el próximo lunes.